Todos hablan aquí de la planta solar Cauchari y los proyectos de extracción de litio, el “oro blanco” que abunda en el corazón de los salares. Ambos dispararon expectativas de que la provincia pueda dar un salto al desarrollo, al tiempo que desataron la avidez de grandes capitales para invertir en proyectos a gran escala. Ese combo es el que trajo a la ciudad de San Salvador de Jujuy el Congreso Internacional de Energías Renovables, con la participación de funcionarios provinciales, directivos, ingenieros y distintos especialistas de los países miembros de la Organización Internacional de Técnicos (OITEC).
“Tomamos las renovables como una política de Estado, porque sabemos que tenemos unas de las mejores radiaciones solares del mundo. Cauchari es un caso que se estudia en todo el mundo: les llama la atención una planta solar a 4.200 metros de altura”, subrayó Mario Pizarro, secretario de Energía provincial.
El funcionario destacó que los nuevos proyectos “reactivarán la matriz productiva” y adelantó la inauguración de una decena de pueblos solares y el proyecto para abastecer la ciudad de La Quiaca con una central que conjugue gas y tecnología fotovoltaica. “Pusimos primera y no hay marcha atrás en el camino hacia la no contaminación y las políticas para detener el cambio climático”, concluyó.
El mayor desafío, sobre el que existe un principio de acuerdo para el financiamiento chino, será ampliar la capacidad de generación de Cachauri de los 300 Mw originales a 500 Mw, suficientes para abastecer a unos 250 mil hogares. En una etapa secundaria se construirán otras plantas que aportarían 96 Mw que no serían inyectados a la red nacional y quedarían para ser consumidos exclusivamente a nivel local. De todos modos, todavía resta por concluir alrededor de un 60% del plan inicial.
Litio, la otra atracción
El otro punto de interés para especialistas e inversores es la posibilidad de que la región se consolide como una importante proveedora de carbonato de litio de alta calidad para los mercados mundiales. El objetivo parece obvio: los suelos jujeños concentran el 36% de los recursos de este mineral que existen en nuestro país. Uno de los actores, junto a Salta y Catamarca, de lo que se conoce como “el triángulo del litio”. La demanda de un elemento vital para la industria moderna, sobre todo para las baterías de miles de millones de celulares, impactó en la producción: saltó de las 979 toneladas de 2015 a las casi 12.500 tns de 2018.
El titular de JEMSE (Jujuy Energía y Minería Sociedad del Estado), Carlos Oehler, recordó que ya en 2011 el litio fue declarado “material estratégico”. Sobrevolaron en el congreso varias posibles emprendimientos en asociación con inversores extranjeros, de los que Oehler mencionó dos que estarían bastante encaminados: la chance de fabricar baterías en sociedad con capitales italianos y un proyecto apoyado por el Banco Europeo de Inversiones para generar y acumular energía a partir de fuentes fotovoltaicas y gas.
También trascendió que en breve se anunciaría al adjudicatario de las 35.000 hectáreas potencialmente productoras de litio, ubicadas en Salinas Grandes, Laguna de Guayatayoc y Salar de Jama, que salieron a licitación en enero.
El panorama de las renovables en el país ofrece luces y sombras. Desde la puesta en marcha del programa RenovAr entraron en operación comercial más de 20 proyectos de energías renovables en 10 provincias, por más de 590 Mw de potencia instalada,. La mayor parte de ellos a través de parques eólicos y solares. Pero aunque el sector fue de alguna manera “blindado” para soportar los vaivenes económicos, la prolongación de la crisis durante los últimos meses mostró ciertas dificultades para el financiamiento de los proyectos. De eso también se estará hablando aquí por estas horas.
Fuente: Ámbito