Todas las bondades del olivar aún no están descubiertas. Este árbol que tanto da a la tierra jiennense sigue sorprendiendo con los usos que se pueden derivar de sus frutos. Así lo constató Francisco Arjona, un inventor que, tras estudiar el proyecto durante cinco años, descubrió que el hueso de la aceituna puede servir para mucho más que solo su reutilización para la biomasa. Así, Arjona patentó un producto novedoso, versátil y, sobre todo, ecológico: el uso del hueso de la aceituna para crear el revestimiento del mobiliario.
La iniciativa surge a raíz de las inquietudes de este inventor cordobés, quien buscaba una forma de crear más oportunidades en el entorno rural andaluz. Con la crisis, dejó atrás su profesión de arquitecto técnico y se centró en la biomasa. En este campo, se da cuenta de que se le puede sacar más jugo al hueso de la aceituna, por muy seco que esté. Así, Arjona presenta hoy su propia marca: Paninos, donde trabaja con su amigo de la infancia, Juan Cabello, que es carpintero.
Esta patente cordobesa tiene un gran valor agregado: es un producto que puede generar más empleo y sobre todo, es algo novedoso a nivel mundial. De hecho, presentarán esta iniciativa en la feria “Maison & Objet”, en París, con un estand propio dependiente del Ministerio de Industria.
“Percibimos que el hueso era muy plástico y adquiría una apariencia muy diferente a los materiales existentes en decoración y contaba con un gran potencial estético”, explica Francisco Arjona. Asimismo, sostiene que con el proyecto se puede generar más riqueza del olivar y añade: “No todo está inventado y esta patente europea es un ejemplo de ellos. Ahora corresponde empezar a producir y contar con más empresarios dispuestos a participar en su desarrollo”.
Paninos tiene, actualmente, muy buena acogida entre las personas que valoran lo novedoso, ya que el revestimiento de hueso de aceituna permite multitud de colores y diseños. Respecto a su naturaleza ecológica y sostenible, el hueso, al generarse de forma natural y ser un residuo, mayoritariamente se usa para venderlo como biomasa. Sin embargo, en comparación, el precio que se obtiene de la venta de biomasa es muy bajo. Es decir, que son mayores los beneficios si se utiliza para muebles, ya que el hueso cuesta lo mismo para ambos sectores.
Entre los diferentes tipos de muebles que se pueden revestir con este componente, destacan las encimeras de baño, las mesas, las puertas e incluso láminas decorativas para las paredes. Asimismo, también se puede destinar al revestimiento de las encimeras de cocina. Sin embargo, así como pasa con el silestone, puede sufrir algunas quemaduras en el caso de poner encima una sartén muy caliente.
Fuente: Diario de Jaen