En medio de la escalada en los reclamos del campo al presidente Javier Milei, cámara empresarial de biocombustibles le envió una carta a la secretaría de Energía, María Tettamanti, en la que advierten que el gobierno nacional lleva adelante una “política destinada a perjudicar a la industria del biodiesel” y le atribuyen ser “anticampo y antiambiente”.
Las compañías nucleadas en la Cámara de Empresas Pymes Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (Cepreb) le reclaman que el valor de la tonelada responda a la fórmula polinómica vigente, dado que la resolución 963/23 prevé un precio testigo en base a mediciones del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) que no se están respetando.
Fuentes del sector aseguran que la gestión libertaria comenzó a transgredir la norma a partir de julio de 2024 y que sus medidas debilitan la producción y provisión del mercado interno.
No se trata de un reclamo menor, la organización nuclea a 27 productoras de biodiesel ubicadas en La Pampa, San Luis, Entre Ríos y Buenos Aires y que sostienen que no pueden seguir “produciendo a pérdida”.
Los productores acusan a Javier Milei por llevar adelante una “política destinada a perjudicar a la industria del Biodiesel”.
La cámara del sector detalla que valor de la mano de obra a septiembre registró un aumento del 86,9%; el costo del aceite de soja, un 36%; el costo del metanol, un 31,6%; diésel de grado 3, un 45, 8%; diésel del grado 2, un 52,5% y el resto de los costos un 38,5% hasta octubre. El biodiésel, en cambio, consiguió una suba de apenas el 15%.
El 9 de enero pasado, la Secretaría de Energía autorizó un aumento del 2% del valor de la tonelada. De ese modo, el precio mínimo de adquisición del combustible para el corte obligatorio con gasoil quedó en 1.085.887 pesos, 100 mil pesos menos por tonelada necesarios para cubrir los costos. Esto, sin considerar un margen de rentabilidad.
Fuente: Tres Líneas