La región de América Latina se consolida como un líder en la transición energética, con un 70% de generación eléctrica proveniente de fuentes limpias.
La segunda jornada de Future Energy Summit (FES) Argentina fue testigo de un desayuno exclusivo de networking, donde empresarios y autoridades del sector renovable de LATAM se dieron cita para discutir las nuevas oportunidades de inversión en el Cono Sur. Andrés Rebolledo, secretario ejecutivo de la Organización Latinoamericana de Energía (OLADE), fue el encargado de exponer sobre los desafíos y oportunidades de la transición energética en la región.
Rebolledo destacó la importancia de encontrar un espacio común entre los países para impulsar temas de manera colectiva. En este sentido, anunció que este año se buscará una meta en materia de almacenamiento de energía, a pesar de la diversidad tecnológica y de intereses entre los países. Este objetivo se suma a los acuerdos clave logrados en la edición de 2024 celebrada en Paraguay, como la creación de un consejo de planeamiento regional para la integración energética y el compromiso de no construir más plantas de carbón en América Latina.
La región de Latinoamérica ha experimentado un crecimiento constante en las energías renovables. Según el “Panorama Energético de América Latina y el Caribe 2024” presentado por OLADE, en 2024 se alcanzó un 70% de generación eléctrica proveniente de fuentes limpias, con un 40% correspondiente a hidroeléctricas y el resto a energías renovables no convencionales como la solar y eólica.
Rebolledo también destacó que en 2023 la energía eólica creció un 15% y la solar un 37%, con proyecciones de crecimiento del 34% y 33% para 2024, respectivamente. Estos datos refuerzan el papel clave de las renovables en la región y la necesidad de avanzar en soluciones de almacenamiento para maximizar su aprovechamiento.
Finalmente, Rebolledo señaló que “los números persistirán, ya que casi el 100% de los nuevos proyectos que se construyen en la región son renovables. Por lo tanto, será un vector de crecimiento”. Esto refleja el compromiso de la región con la transición energética y el desarrollo sostenible.
Fuente: energiaestrategica