Luego de intimar a YPF a presentar un minucioso plan de remediación de pasivos ambientales “improrrogable”, la empresa presentó los pasos a seguir y la Dirección de Protección Ambiental (DPA) del Ministerio de Energía y Ambiente de Mendoza le dio curso a la propuesta.
Se trata de los pasivos correspondientes a la “Zona Sur ECP-54, margen Sur camino comunero”, en la zona de Lulunta. Entre las condiciones de la resolución se ordena que la documentación presentada por YPF relacionada con la caracterización y el análisis cuantitativo de riesgos de la zona sea evaluada por la Fundación CRICYT, que actuará como Ente Auditor Externo. Ese organismo también supervisará las tareas de remediación de hidrocarburos y emitirá un informe de cierre una vez concluidas. A su vez, la empresa deberá cumplir estrictamente con las conclusiones y requerimientos detallados en el Informe Técnico de la Dirección de Protección Ambiental y actuar con máxima celeridad. Durante el proceso, el Departamento General de Irrigación se encargará de autorizar y registrar cualquier actividad relacionada con el uso de aguas, vertidos, infraestructura hídrica o riesgos asociados en la zona de trabajo. La resolución también dispone que las tareas de remediación ambiental sean monitoreadas por los organismos competentes de la Subsecretaría de Ambiente, en particular la Dirección de Protección Ambiental y la Dirección de Hidráulica. Según lo previsto, la empresa deberá notificar a la Dirección de Protección Ambiental con una antelación de 72 horas el inicio de las tareas de remediación. Esto garantiza la supervisión adecuada y el cumplimiento de los objetivos establecidos.