Pasaron 81 días desde que el Senado de la Nación aprobó la propuesta de Diputados.
La ley de biocombustibles cumplió ayer 81 días de sancionada por el Congreso, pero aún resta el paso de la reglamentación que prometía ajustar algunos de los puntos que más críticas despertaron de su articulado, especialmente por parte de las empresas etanoleras de maíz, de la industria del biodiésel y de las provincias productoras, con Córdoba a la cabeza.
Es que el texto que salió con sanción plena del Senado en los primeros minutos del 16 de julio deja habilitada la posibilidad de bajar el actual corte con etanol de maíz del 6% al 3% si su precio escala y compromete el valor de los surtidores. En el sector temen que bajo esa posibilidad se aplique un recorte por otras razones. Lo mismo ocurre con el biodiésel que, aunque regía un corte del 10% en el gasoil, la nueva norma fija el 5%, también posible de bajar a 3% si la Secretaría de Energía lo cree conveniente.
Claudio Molina, director ejecutivo de la Asociación Argentina de Biocombustible e Hidrógeno, coincidió con los dichos del gobernador Juan Schiaretti de que es necesario sancionar una nueva normativa para subsanar “los errores que tiene lo aprobado por el Congreso”.
“Coincido plenamente que hay que cambiar la ley aprobada en el Congreso y celebro que Schiaretti lo haya manifestado de ese modo”, remarcó el empresario.
Fuente: Puntual