Diversas compañías de energía renovable mantienen paralizados proyectos millonarios por la crisis financiera que hace más de un año azota al país y por la incertidumbre que genera en el sector el inminente cambio de Gobierno en diciembre.
Tal como consignó Reuters, la energía limpia es uno de los sectores que más ha crecido en los últimos años, donde ha pasado a representar casi el 9% del total de la matriz, gracias a los beneficios fiscales que otorgó el Gobierno.
Sin embargo, esos beneficios se han visto diluidos ante las medidas para lidiar con la crisis y ante los temores a una mayor intervención estatal sobre la economía a partir de la asunción de Alberto Fernández.
De ese modo, las inversiones prácticamente se han detenido en un sector que en los últimos años volcó US$ 4.500 millones en el país.
“El programa era iniciar antes de fin de año la construcción, pero con la incertidumbre actual nos hemos visto obligados a (…) ajustar varios detalles”, dijo Ramiro Marquesini, gerente regional de Verano Capital, respecto al parque solar que había planeado desarrollar la empresa.
Vecaso es el nombre del proyecto de 115 MW de potencia y US$ 90 millones que la compañía estaba preparada para comenzar a construir en Mendoza. Sin embargo, Marquesini dijo a Reuters que el descalabro económico argentino afectó la rentabilidad del parque.
Los controles cambiarios establecidos por el BCRA ante la fuga de capitales que generó la inestabilidad económica luego de las PASO también impactaron en el desarrollo de los proyectos. Con la nueva regulación, las divisas giradas por bancos de desarrollo y entidades financieras deben ser convertidas a pesos.
“Lo que hicieron el 100% de los bancos de desarrollo y de las agencias de créditos a las exportaciones fue parar los desembolsos”, dijo Gustavo Castagnino, director de Comunicaciones de Genneia, que ha suspendido el desarrollo de 4 parques eólicos por un total de 200 MW.
En una solicitada, la Cámara Eólica Argentina afirmó que cerca de US$ 2.000 millones en inversiones previstas no están ingresando al país por las medidas que impuso el Gobierno para intentar controlar la crisis.
Para Marcelo Álvarez, presidente de la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER), la coyuntura está afectando a “uno de los pocos sectores que tuvo inversiones reales en el último tiempo”, en particular los proyectos que requieren una gran inversión inicial.