El secretario de Relaciones Económicas Internacionales, Horacio Reyser, señaló que la Argentina sigue apostando a una solución negociada para que el país pueda volver a exportar biodiésel a los Estados Unidos a pesar de que le queda como recurso la posibilidad de reclamar ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
En 2016, por un reclamo de los productores de biodiésel de EE.UU. agrupados en la National Biodiesel Board (NBB), la administración de Donald Trump inició una investigación contra el producto de la Argentina que derivó en la imposición de aranceles promedio del 72% antisubsidios y del 74% antidumping. Todo ese conjunto de sanciones dejó al biodiésel afuera de ese mercado.
Los productores norteamericanos argumentaban que la existencia de retenciones en la Argentina le permitía a la industria comprar más barato el aceite de soja, insumo del biodiésel, y luego vender sin derechos de exportación. En rigor, EE.UU. reclamó y la Argentina fue subiendo la retención al biocombustible hasta un 15%. A esto sumó el esquema de $4 por dólar vigente desde el año pasado.
Para la Argentina, el biodiésel era el principal producto de exportación a Estados Unidos con 1,5 millones de toneladas valuadas en 1300 millones de dólares. A ese mercado se ingresaba con 5,5% de aranceles.
En julio pasado, EE.UU. consideró que habían cambiado las circunstancias en la Argentina con la suba de las retenciones, algo que pedía, y aceptó bajar los aranceles antisubsidios del 72% a un nivel del 0 al 10% según las empresas.
Pero en cambio sigue la tasa del 74 por ciento de derechos antidumping, lo cual continúa frenado el ingreso.
Las empresas argentinas entablaron una demanda ante la Justicia en Nueva York por las sanciones. Hay expectativas por lo que pueda suceder con esa alternativa, ya que podría abrir la puerta a la presentación de propuestas. Según expresa la nota de La Nación.