“El uso de la energía solar «reduce en un 40 por ciento el consumo de energía que se utiliza para calefaccionar los hogares”, así lo afirmó Pablo Greco, Director de Hissuma Solar, compañía internacional dedicada a la energía solar, que tiene como objetivo llevar energía renovable a los consumidores en forma económica y sustentable.
Según sostuvo Greco, “en un escenario de inestabilidad con respecto a los aumentos de tarifas es fundamental contar con un sistema que nos permita ahorrar energía, reduciendo sustancialmente los costos y a su vez, apostar por el cuidado del medio ambiente”. En ese sentido, plantea que la solución es calefaccionar las viviendas a través de paneles solares.
Para lograrlo, explicó, existen sistemas denominados “tres en uno” que buscan reemplazar a los termotanques convencionales y permiten contar con agua caliente sanitaria, calefacción en el invierno y climatización de piletas en el verano. “Si bien son más costosos nos brindan estas más posibilidades a un costo bastante razonable de inversión y con un recupero de aproximadamente 4 años”, opinó.
El Director también detalló más beneficios de los paneles solares: “En los lugares donde no hay fluido de gas natural o mismo considerando los aumentos en energía eléctrica que ha habido en el último tiempo, el poder utilizar un sistema tan completo se vuelve fundamental”.
En sintonía, el especialista en energía solar subrayó que es posible calefaccionar el hogar a través de sistemas de piso radiante, radiadores o sistema de fan coil (aires acondicionados especiales), “los cuales se van a nutrir de colectores solares con sus correspondientes tanques de acumulación en donde se almacenará ese calor acumulado y se enviará al sistema a través de intercambiadores de calor ayudados por bombas de re-circulación”.
Por último, Greco especificó las diferencias “enormes” que existen entre el consumo domiciliario con el de que se realiza a gran escala. “El calentamiento de agua por sistema solar a gran escala permite por lo tanto calefaccionar edificios, hoteles y plantas industriales; por ejemplo, alimentando las calderas de un proceso productivo. De este modo las posibilidades de uso y ahorro crecen exponencialmente”, concluyó.