Mediante su visión estratégica del sector energético, el gobierno chileno estableció un 60 % como objetivo de generación de energías limpias para el 2035 y un objetivo del 70 % para el 2050.
Dentro del marco de la Política Energética 2050, el Ministerio de Energía desarrolló una ruta energética para el período hasta el 2022, conocido como “Ruta Energética 2018 – 2022: Liderando la modernización con sello ciudadano”, que estructura los objetivos del nuevo gobierno que comenzó su legislatura en marzo del 2018.
El informe más reciente sobre las Inversiones de Generación Distribuida y PMGD en Chile, abarcó los objetivos de las energías renovables en Chile, analizando el mercado regulatorio actual, las nuevas tecnologías, la capacidad instalada y mucho más.
Fuera de las subastas de energía para el desarrollo de proyectos a gran escala, la energía distribuida de fuentes renovables es un fundamento en esta ruta energética. En ese sentido, el gobierno estableció una meta para incrementar cuatro veces la capacidad instalada de generación distribuida actual para el 2022.
Los proyectos de generación distribuida de energías renovables en Chile pueden desarrollarse bajo el sistema de medición neta para propiedades residenciales o como un sistema de pequeño sistema de generación distribuida, conocido como Pequeños Medios de Generación Distribuidos (PMGD).
“También existe una importante cartera de proyectos solares y eólicos permitiendo a patrocinadores y a financiadores internacionales tomar una iniciativa a largo plazo. Los bancos locales, como BICE, están considerando financiar estos proyectos para que las estructuras del balance general puedan ser consideradas por estos financiadores, haciéndolos aún más atractivos”, Stephen Hill, Director de Infraestructura y Energía en Latinoamérica de Eversheds Sutherland, comentó para Renewables Now.
Fuente: CIREC