La ministra de Energía de Chile, Susana Jiménez, y el subsecretario, Ricardo Irarrázabal, lideraron este jueves la sesión de clausura de la “Mesa de Descarbornización de la Matriz Eléctrica” (MDE), que inició su trabajo en junio pasado. La MDE tuvo nueve sesiones y contó con representantes de las empresas generadoras, del sector público, de instituciones independientes, gremios, asociaciones de consumidores, ONGs, sindicatos, municipios, sociedad civil, académicos y organismos internacionales.
La generación a carbón constituye hoy la principal fuente de generación eléctrica del país, con cerca de un 40% de la matriz.
El objetivo de la Mesa fue analizar, por primera vez, los efectos del retiro y reconversión de unidades a carbón sobre la seguridad y la eficiencia económica del sistema eléctrico nacional, la actividad económica local y los aspectos medioambientales que tengan incidencia.
En las nueve sesiones realizadas entre junio y enero se presentaron diversos estudios, hubo una veintena de expositores y se abordaron los eventuales impactos del retiro de las centrales en la calidad del aire, la salud de las personas; en el sistema eléctrico nacional; y en la economía y las fuentes laborales.
Además, se analizaron experiencias similares en varios países, entre ellos, Alemania, Reino Unido y Estados Unidos, y se evaluaron alternativas de reconversión tecnológicas que podrían reemplazar la generación eléctrica a carbón.
A partir de los resultados de la Mesa, el Ministerio de Energía acordará con las empresas generadoras un cronograma, y las condiciones para el cese programado y gradual de la operación de centrales a carbón, que no cuenten con sistemas de captura y almacenamiento de carbono u otras tecnologías equivalentes.
La ministra destacó que en la Mesa se logró “sensibilizar las distintas miradas para tomar una buena decisión para el país. Creo que el proceso fue bastante bien valorado, y que se lograron los objetivos. Ahora comienza la siguiente etapa en que volvemos a sentarnos los firmantes del acuerdo, que son el Ministerio de Energía y las empresas generadoras de carbón para, teniendo a la visita todos los factores, acordar un cronograma de retiro y reconversión”.
La autoridad de Energía resaltó lo “inédito” de la Mesa, ya que “ningún país no desarrollado que ha logrado un proceso como éste tiene una participación del carbón del 40% en la matriz eléctrica. Por lo tanto, hay que ser responsable a la hora de establecer el cronograma para que, en la medida que se van retirando centrales a carbón, puedan ser reemplazadas por otras fuentes de generación”.
Fuente: PV Magazine